05 febrero 2008

Prueba


Esto es una prueba

10 enero 2006

Migración en curso...

Me voy de Blogger. :-) mi nueva dirección será http://elblogderamma.turincon.com y el cambio ya está hecho. La dirección ya funciona. El look de mi nuevo sitio es de momento idéntico (salvo leves fallos que corrijo ahora) al de aquí, (para hacer leve el cambio y además porque me había quedado de puta madre, qué leches...) pero el colosal poderío de wordpress (versión 2.0, Duke) hará que poco a poco pueda crecer sin límite.

Aún no luce de forma perfecta, pero ya está casi listo. A partir de ahora sigo allí, y salvo catástrofe no volveré aquí. Si alguien me leía mediante feed, que sepa que también ha cambiado. :-)

Todo ha cambiado, pero todo sigue igual. :-)

02 enero 2006

Ya lo han dicho otros....

Nunca me gustaron los posts que copian la letra de una canción como indicativo de un estado de ánimo, o como queriendo decir que la letra de esa canción se adapta como un guante a lo que sienten en ese momento, o que eso podrían decirlo ahora exactamente. Los posts o las conversaciones en directo, en nuestra vida social, claro. En general la idea de que "me pasa eso", aludiendo a una canción. Lo digo porque es un tipo de post bastante habitual cuando se pone el piloto automático...

Y no me gusta porque es una copia, claro, pero además es que no me creo que una canción pueda adaptarse a ninguna vivencia de forma exacta: siempre hay matices individuales, y si no se explican es como no haber puesto nada. Incluso en canciones asquerosamente genéricas, como "grita" o "Agua", de Jarabe de Palo, que hablan sin detalles de cosas que nos pasan a todos.

No me gusta pero lo hago... :-D ya que confieso que mi cabeza está ida, no me centro, no puedo pensar, no estoy para nadie, y pongo el piloto automático. Como ya digo, la canción no es aplicable ya que ninguna lo és nunca. La "forma" no se adapta en absoluto (una historia 100% diferente), pero sí algo el fondo. Curiosamente el fondo. y para darse cuenta basta ponerla y notar que afecta, la cabrona... en negrita, las partes de la "forma" que se parecen. Pocas, como ya digo:

Fue en un pueblo con mar
una noche después de un concierto,
tú reinabas detrás de la barra
del único bar que vimos abierto.
Cántame una canción al oído
te sirvo y no pagas.
Sólo canto si tú me demuestras
que es verde la luz de tus ojos de gata.

Loco por que me diera
la llave de su dormitorio
esa noche canté al piano del amanecer
todo mi repertorio.
Con el "Quiero beber" el alcohol
me acunó entre sus mantas
y soñé con sus ojos de gata pero no recordé
que de mí algo esperaba.

Desperté con resaca y busqué
pero allí ya no estaba.
Me dijeron que se mosqueó
porque me emborraché y la usé como almohada.
Comentó por ahí
que yo era un chaval ordinario,
pero cómo explicar que me vuelvo vulgar
al bajarme de cada escenario.


Ojos de gata. Los Secretos. Por cierto, ese pepino que se vé es mi reloj nuevo, cortesía de uno de mis ángeles de la guarda. Quién lo haya pagado, es simplemente irrelevante. ;-) En mi mano mola aún más, si cabe.

01 enero 2006

Se impone la crudeza

Aunque la Navidad me sienta bien y me gusta, también tiene para mí repercusiones negativas. En navidad me como mucho la cabeza, y pienso en lo que hay en mi vida que me gusta, y que no me gusta. Hago análisis de conciencia, y me propongo cambios... para ello tengo que ser sincero conmigo mismo y darme cuenta con crudeza de que soy un auténtico gilipollas. Ramón, tío, es que eres un auténtico Gilipollas.

Y no pasa en otra época del año, ya que te dedicas a vivir y a comerte como mucho la cabeza por las cosillas del día a día, mucho menos trascendentes y que normalmente hacen sentirse mejor a uno. En navidad, acompañando a lo bueno, viene lo malo de pensar por qué esa y esa y esa otra personas están fuera de tu vida, y no puedes verles por alguna cagada en su momento, o por circunstancias de la vida, o por mil cosas.

¿Por qué vives dando la impresión de que pasas de todo, y por qué ni puedes evitarlo, ni muchas veces quieres siquiera?. Si tú y yo sabemos que nada te resbala, Ramón: todo te afecta, todo lo sientes intensamente y eres un puñetero sentimental. ¿Por qué cojones valoras más al que no está que al que está?... ¿Por qué, para muchas personas de tu entorno, resultaría preferible ser un satélite para tí, en vez de haber dejado de serlo?

¿Y por qué algunas veces, mientras piensas intensamente sobre lo intrascendente, dejas sin atención lo importante?. Por qué dedicas tus pensamientos a cosas sin importancia, y así andas embotado y espeso pensando en todo y en nada a la vez, mientras te ocurren tremendas cagadas que no tienen justificación, ni siquiera con la puñetera y maliciosa frase "es que yo soy así". Ramón, joer... que se fué sola para casa. Sola. Lloviendo y sin paraguas. ¿en qué carajo estabas pensando? ¿y qué decimos ahora? ...y es que efectivamente eres así, Ramón, y esa cagada es sólo una más... pero qué diablos: ¿por qué maldita cosa eres así?. ¿No sabes lo que yo sé? ¿no somos el mismo? ¿no sabes como evitarlo? ¿No sabes que debes y puedes evitarlo? ¿Qué carajo te pasa? ¿Estás ciego, o sólo miras para otra parte? Ramón: hay que darse tortazos... nunca se ha dado uno los suficientes.

La cosa tiene narices... El tío va por autovía a todo trapo hasta el momento de tener que tomar una salida ...................................... y luego va y no la toma. Sigue por la autovía (que en sí no va a ninguna parte: sólo lo hacen sus salidas) primero lamentándose (incluso profundamente, si será bobo) de haber dejado atrás la salida buena, y luego siendo "práctico" y mirando a ver cuál es la siguiente salida aceptable...

Supongo que se siente cómodo y seguro circulando por autovía... Porque tienes razón, miserable... casi siempre resulta que tienes razón: jode que te rompan el corazón. Jode que incluso el golpe sea tan grande que se pierda algún pedacito de forma prácticamente irrecuperable, jode amar "en vacío", jode todo eso que ya nos ha jodido y nos joderá, pero es que eres un cagao. A nuestro corazón le falta algún pedacito... y a tí te falta coraje. Pido perdón en su nombre a toda la gente que está en medio de sus cagadas. A toda esa gente que "sufre" su deliberada ausencia de implicación en todo, que se sabe querida por él pero no lo nota. Toda esa gente que Ramón dice que no se merece pero que sí que se la merece, y que se merecen mucho más de Ramón.

Ramón, tío. Lo que yo te diga: Un auténtico Gilipollas. Parece que no tengas espíritu, con lo que valemos tú y yo.

26 diciembre 2005

Dulce navidad...

Feliz navidad... Acabo de llegar de León, De pasar los días navideños con mi familia, y tengo muy poco tiempo antes de volver a trabajar mañana... Me gusta la Navidad. No lo puedo evitar, aunque objetivamente es una época del año en la que se agolpan fechas de malos recuerdos, de gente que falta, de gente que querrías que estuvieran y no están. Pero en el fondo me gusta mucho. Aunque se haya convertido mayormente en un marathon consumista, y en el "agosto" de los negocios que nos venden lo superfluo.... es un puntazo regalar, y todos caemos: yo caigo. Me gusta la visita de los Reyes Magos, en los que creo firmemente. Me gusta la socialización que propugna la Navidad, eso de verse y compartir tiempo con gente que no nos acompaña durante el año, brindar, comer, hablar con ellos, estrechar lazos que no siempre se quedan en nada... (Muchas veces, lazos que estrechamos en Navidad perduran luego y se afianzan durante el año) La navidad me mola.

Al principio no... Me refiero a mediados de Noviembre, cuando se empieza a ver que va llegando. Sólo se vé lo malo. Es demasiado pronto para socializar, para brindar, para felicitar, para regalar... sólo se aprecia lo malo: los negocios van preparando su momento, y objetivamente es una mierda. :-D Empiezan a verse anuncios navideños, empieza el tufo navideño, lo peor...

Pero Luego, en Diciembre la cosa cambia. La gente se muestra más feliz (igual es una pose, pero anima, joer.) y la Navidad empieza a mostrar su mejor cara, mientras van llegando los días potentes.

Y los "días potentes" en mi caso empezaron el jueves.... :-) Llegó el mejor día del año, laboralmente hablando. No creo que haya nada mejor a cambio de un sueldo: repartir las cestas navideñas que ofrece la empresa a los empleados. No siempre se puede hacer así, pero a mi me gusta entregarlas una por una, en mano, y felicitar las fiestas. Te queda el cuerpo de puta madre. :-) Aunque el día objetivamente sea chungo, ya que el mundo no se para para que Ramón reparta las cestas, sino que sigue y sigue. Y la carga de trabajo agobia. Pero ése día tengo las pilas puestas y no se me quita la alegría de la navidad, ni el ánimo de estar haciendo en la empresa lo más satisfactorio que se puede hacer en una empresa. Ese día la energía me desborda, y cuando entrego la última me queda un enorme optimismo "navideño" :-)

El viernes fué reunión anual navideña de la empresa (la cena, vamos.... :-D) a la cual, (y no como el año pasado) ésta vez no llegamos tarde. Digo "llegamos" en plural porque unos cuantos quedamos antes de la hora oficial para tomar algo y vernos antes (como supongo que haría casi todo el mundo). El caso es que llegamos a tiempo al restaurante Bellavista. La noche terminó "para mí" a ésto de las 6 y media de la mañana en algún lugar del fomento. Tuve que irme antes de lo preferíble, ya que una vez más, me esperaban compromisos ineludibles con la familia a la mañana siguiente (bien prontito, y que incluían conducir La Bestia Bella), ya la mañana de nochebuena.

Lo ocurrido tras la cena en la noche fué una típica "noche joven", en la cual salimos por varios locales de Gijón a bailar, con la diferencia de que evidentemente éramos todos compañeros de trabajo, que no solemos salir de marcha juntos. Gente con una vida personal "llena" de cosas que habitualmente desconocemos, aunque en realidad pasemos muchas horas al año con ellos. Con la vorágine laboral diaria, les vemos y quizá les saludemos y crucemos unas palabras, pero no más. De hecho, durante la velada, algunos compañeros se conocieron por primera vez "literalmente", llevando ya varios años en la empresa. Eso bien mirado, es triste. Y es lo que en parte soluciona la cena de empresa.

Por eso me encanta el día de la cena: porque realmente creo que en KLK lo que merece la pena es la calidad humana de la gente, que (en mi caso al menos) hace que trabaje a gusto, cómodo y con la sensación de estar bien rodeado. Me encantan mis compañeros, los que día a día trato en el transcurso del trabajo y los que simplemente veo y saludo de vez en cuando. Por eso me encanta que una noche haya posibilidad de tratarlos, brindar con ellos, conocerlos un poco más y todo eso. Todos los años me queda un inmejorable sabor de boca: y la sensación de que realmente son tan buena gente como parece. Soy muy afortunado. Incluso molan mis Jefes, joer...

Sobre la cena en sí, poco hay que decir: un puntazo de la jefatura, (Muchas gracias) y aunque ya el año anterior lo fué igualmente, hay que decir que éste año el evento resultó "técnicamente" mejor. El sitio era más elegante, y la cena más sabrosa y adecuada. En general, al gusto de más gente. Aunque para mí eso es lo de menos... Comimos bien, en un sitio elegante y con un servicio esmerado y correcto, pero lo importante es que nos reunimos todos en torno a un acto social que salió muy bien. Yo lo pasé muy bien en mi mesa durante la cena, en los corrillos anteriores, y en la sobremesa, donde me quedo (entre otras muchas cosas) con la frase del señor Garriz: "Ramón, el rey de la Materia Prima". :-D El príncipe, corregí yo. :-p

Tras la cena, de marcha por Gijón. Recuerdo muchas cosas, pero diré que me quedé "pillado" recordando el Idus de Marzo (No, no fuimos allí, pero salió el garito en la conversación) y se me fué la cabeza a recordar mis primeras andanzas nocturnas, que tuvieron ése mítico garito gijonés como decorado. Recuerdo que por aquél entonces, la pandi nos preguntábamos qué carajo tenía ese sitio para tenernos allí horas y horas todas las noches, cuando la música en realidad nos gustaba a 4, (estilo "Morbo": variedad, sonido español, poco dance o nada, y alguna horterada suelta) y las copas tiraban a "caras"...

Yo siempre pensé que era el ambiente que se reunía allí, que era selecto hasta el punto que nosotros eramos "de lo peor"... :-D Se encontraban chicas con mucha clase. Al parecer, eso no ha cambiado... :-)

Muy a mi pesar, antes del fin de fiesta tuve que rendirme al reloj, y a riesgo de ser considerado un carca "mayor", estando muy agustito y en muy buena compañía, tuve que irme. A las 12 tenía que ponerme a los mandos de La Bestia Bella y llevar a toda la familia a Valencia de Don Juan, un viajecito de unas dos horitas en un día muy señalado. No podía jugar con eso.

Me levanté algo justo, me preparé y me dí caña con un café poderoso. No había secuelas de la noche, sólo un acusado cansancio, de toda la semana. Nada grave. Cargamos el coche y pusimos rumbo a León. Dejaba atrás (una vez más) la salida de la autopista hacia Babia, cuando curiosamente sonaba Coti en el loro. Concretamente Julieta Venegas con Coti, y conmigo canturreando entre dientes eso de "tu nombre"... :-D Tiene narices, la cosa. Mi memoria andaba fresca, mi mente ágil y mientras me adentraba en el Páramo, pensaba en la curiosa conexión. A pesar de estar muy a menudo "en Babia", en realidad siempre que llego a esa desviación sigo de frente. En verdad nunca he estado en Babia: a lo sumo he pasado por ella. Pasado de largo. Dos veces, creo recordar.

19 diciembre 2005

Lo tenemos, prueba...

El mundo es un pañuelo... y termina conectando todo de tal manera que parece magia. Dos casos evidentes lo ponen de manifiesto, aunque uno de ellos no es tan aleatorio así que no vale tanto. El otro si. Totalmente aleatorio, conecta de forma increíble dos mundos muy diferentes. Parece magia.

Para ponerse en antecedentes, todo parte del verano. Así que resulta conveniente leer lo que escribí aún allí, en mi pueblo, en la última semana de mis vacaciones. Hablaba de que ya se acababa, y trazaba lineas maestras de lo que fué uno de los mejores veranos entre los últimos que he vivido. Es bueno leerlo. Para ir aterrizando, partamos de la frase:

que me dejó a la Bestia Bella inundada de chocolate

Concretamente lo hizo descargando a saco su pulverizador de colonia sobre el diablillo de peluche que me acompaña desde hace varios años, cargadito a tope de valor sentimental. "para que te acuerdes de mi", espetó. :-D Inmediatamente decido tomarle el pelo, y escenifico una escena como si lo que acaba de hacer (profanar el diablillo con su colonia) tuviera visos de pecado mortal.... :-D Ella, pensando que el diablillo tendría ya un olor "recordable" que había profanado, cae en la trampa y se queda toda pillada, arrepentida y eso. Me pide perdón, yo la disculpo y nos reímos de la intensidad con la que se toma las cosas... :-D

El caso es que con la movida, el diablillo quedó repleto de olor a chocolate. Y el olor inundaba a La Bestia Bella hasta el punto de que tuve que suprimir el ambientador para evitar que se mezclaran lastimosamente los olores. Una vez hecho, comprobé que el olor a chocolate en la Bestia Bella molaba un huevo. Suave, delicado y único. Lamentablemente ahora ya casi no se nota, pero bueno. Se nota todavía mucho en el diablillo. :-)

Aún en León de vacaciones, se acercaba su cumpleaños y se me ocurrió intentar encontrar ese olor. Pregunté en perfumerías que me encontraba por un perfume o colonia que oliese a chocolate. Suponía que sería preguntar y obtener respuesta afirmativa, pero se vé que no... No hay colonias ni perfumes que huelan a chocolate, me decían las dependientas. Incluso en la calle Ancha de León, en un "supermercado del perfume" se me dijo que eso no existía. Que a lo sumo tenía sales de baño, y Gel. Lo que empezó de forma trivial se convirtió en algo personal... ¿coooooomo que no existe? Si mi coche huele a ello, oye. Tenía que encontrarlo. Existía y yo daría con él. No era una búsqueda sistemática, claro, pero perfumería que me topaba, entraba y preguntaba. El mito del chocolate se agigantaba. No existía eso, me decían, una y otra vez. :-D

Me voy a Madrid de Boda, (leerlo, creo que mola....) y con la cosa pregunto en otros dos sitios, obteniendo la misma respuesta. No busques, que no hay. No existe... Llego a Gijón y en mis compras esporádicas (que suelen ser en gran superficie) sondeo las perfumerías, hasta que ya en la última opción casi, ocurre el milagro. Una guapisima morena me dá por fin la buena noticia: "Lo tenemos, prueba". Acto seguido impregna una cartulinita verde, con un perfume en tarro azul muy elegante, en forma de estrella. Aspiro, y efectivamente: ¡¡¡¡huele a chocolate!!!! me cuenta que es un diseño recargable, que es de gran calidad, y bla bla... y me dice que su precio son 78 Euros. Le agradezco su atención y declino comprar: se me hace algo carillo y además, evidentemente sólo pretendía comprobar que existe, y dónde y cómo puedo encontrarlo.

Me quedo con la cartulina y la dejo en la Bestia Bella, comprobando al día siguiente que el perfume es potente. La bestia Bella de nuevo se había impregnado, aunque me resultaba evidente que no era el mismo perfume. Es otro, que huele a chocolate, pero distinto. Y ahí se queda la cosa. Prueba conseguida: Existe.

Por otro lado y sin tener nada que ver con lo anterior, me aficiono al fútbol Femenino, y empiezo a asistir a todos los partidos del primer filial del Gijón Fútbol Femenino, Club por cierto de Superliga Femenina (élite nacional). El filial, el B, milita en Regional Asturiana. Los motivos de que me aficione al B y no al primer equipo, en la élite nacional, exceden los objetivos de éste texto. :-) Lo contaré, pero otro día. :-D

Pues resulta que un día en un partido fuera de casa, en el descanso, una jugadora se tiene que ir porque trabaja. En el Corte Inglés, me dicen. Y al poco tiempo voy a ver "puntualmente" un partido del primer equipo, el que jugaron contra el barcelona. Digo puntualmemte porque mi equipo es el B. El caso es que un día voy y en la grada están muchas de las jugadoras del filial, entre ellas la que trabaja el Corte Ingles. Las chicas cambian mucho vestidas de corto: cuando la ví en la grada, me sonó su cara y no supe de qué, pero me quedó el runrun.... Este sábado volví a verla en la grada, ya que no podía jugar porque entraba a trabajar de nuevo. De repente até cabos. Un flash mortal me recorrió, y lo comprobé. ¡Claro, coño, el Corte Ingles!

Carla, la portera del filial del Gijón Fútbol Femenino, es la morena guapísima que me dió la buena noticia de la existencia del perfume que "no existía". Y viceversa, "la única dependienta en el mundo" que tiene para mí un perfume que huele a chocolate, es la portera del Gijón Fútbol Femenino B, equipo (casi casi único equipo) del que soy aficionado. Y mira que hay equipos. Y mira que hay dependientas precisamente en su tienda. Unas cuantas. Pues si, fué ella la que me atendió, y tras una leve duda (el perfume no es de chocolate: el perfume lleva chocolate) me dió la buena noticia de que mi búsqueda se había terminado. "Lo tenemos, prueba". Toma ya.

Hay una conexión mágica en el universo, el mundo es un pañuelo y todos los tópicos del mundo juntos, pero el caso es acojonante. ¿que no? :-)