La verdad es que ya era hora de ir a cenar en condiciones en Gijón. Este año por fin tocó: una mariscada como Dios manda en un sitio de categoría y con la mejor compañía posible.Todo salió bien y la comida estaba riquisima, y el postre de campanillas y todo eso. No puedo extenderme porque salgo pitando para mi pueblo, donde proseguiré suavemente con mis merecidas vacaciones.
El restaurante La Zamorana venía precedido de mucho nombre, y realmente ofrece lo que de él se espera: Entorno elegante, comida de lujo y servicio de lujo, y precio ligeramente desorbitado (aunque en realidad no tanto, o más bien según se mire. Lo que es cierto es que resultó la pitanza por la que más he pagado en la vida...)
Ahora seguimos en el pueblo, donde ya por fin éste finde llegará toda la gente que a mi me importa, y donde lo seguiré pasando en grande. Aunque me joda "ligeramente" perderme el cumpleaños de Lorena (Felicidadessssssssssssssss) que coincide lastimosamente con otro acto social pactado, cerrado e irrenunciable, que no puedo eludir.
Seguiremos...
11 agosto 2005
Más Vacaciones...
Publicado por
Ramma
en
4:04 a. m.
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2 comentarios:
Esta Lore se queja por todo. Di NO!!! y no quites la foto, añade más si quieres, jejeje
Tengo que quitarla, María. Que Lore tiene fotos muy comprometidas mías, y no está el horno para bollos.... :-p
Ya ves, que bobada, pero insiste que la quite, y ni puedo ni debo negarme. :-)
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